lunes, 22 de noviembre de 2010

DOS MUJERES vidas sencillas

Con una tristeza que no reconocía Carmen dobla las sabanas del sofá cama del apartamento que una amiga le había ofrecido para pasar unos días en la costa.
Se había dejado el pelo largo, aunque ella sabía que le favorecía más el pelo corto.
Después de cuatro o quizá fueron cinco las parejas con las que había compartido su vida, su última pareja diez años mas joven que ella, estaba llegando a su fin.

Aquella mujer de aspecto frágil que paseaba por la playa le llamó la atención a Carmen.

Nunca se había planteado que fuera bisexual, pero la relación que nació entre esas dos mujeres, era algo más, tampoco era enamoramiento; pero desde el día que paseando por la playa escuchó que la gritaban en un tono cargado de asco “Si te vieras lo ridícula que estas con ese sombrero” mientras Sara se metía los pies en el mar para limpiar la arena.
¿Porque me tiene que tratar con tanta brusquedad? Dijo Sara moviendo los labios.
¿Tengo que tomar una decisión? _ Me está destruyendo.

Esto se lo repetía en la últimas vacaciones, Ya no era la muchacha que Víctor la conquistó en las fiestas del pueblo donde ella pasaba sus vacaciones.
Ahora madre de dos hijos varones, ella se siente con otros encantos.

El aire que entraba por su nariz la resonaba en su espalda, Víctor dormía.Sara pensaba, siempre pensaba, se tapó su cuerpo desnudo con las sabanas y pensó que era hermoso saber que Carmen estaba marcando su número de teléfono móvil para enviarla un mensaje.
“Si las estrellas fueran mías te regalaría una”
Un beso Carmen.
África

12 comentarios:

César dijo...

No te importa que me quede callado?
Hay cosas que no deben ser comentadas, sino vividas.

El Drac dijo...

Qué bello, en verdad hay situaciones que nos brindan agradecimientos or estar vivos y receptivos. Un abrazo

Yemaya dijo...

Sólo puedo decir. Que hermoso!!.
Besos y susurros dulces

Belén dijo...

Si es lo que dicen...que muchas veces el amor es cuestión de personas, no de géneros...

Besicos

Marisol Cragg de Mark dijo...

Los sentimientos se viven...nada más.
Me gustó leerte.

pepa mas gisbert dijo...

Todo consiste en encontrar alguien que te escuche y saber escuchar.

Camy dijo...

Sara sabrá de nuevo lo que es cosquilleo en el estómago ante los mensajes de Carmen. La complicidad con otra persona confiere tranquilidad, inquietud, confianza y amor.
¿Quién dice que ha de ser del sexo opuesto?
Cada vez con más frecuencia mujeres y hombres proclaman su amor por la persona sea o no hombre o mujer.
La sociedad debe de cambiar por completo y aceptar la realidad.
Un beso

Bowman dijo...

El objetivo en esta vida es ser razonablemente feliz; una vida compartida te la puede dar, el sexo de la otra persona sólo es algo anecdótico.
Precioso relato.
Besos

Miguel Baquero dijo...

Lo importante es ese modo de recibir mensajes y pensar en la otra persona, más que el sexo al que pertenezca o que la edad incluso

Mayte Llera (Dalianegra) dijo...

Hola, África querida!!! Me ha encantado este relato donde nos expones que lo primordial en las relaciones humanas es que nos hagan sentir bien con nosotros mismos. Y eso no puede ocurrir si nuestra pareja no nos respeta y trata con un mínimo de cariño, por eso no es extraño buscarse otra, sea del sexo opuesto o del mismo, pero que nos haga volver a sonreír y a ilusionarnos.

Y por supuesto que no sólo no me molesta que me llames "amiga", sino que me encanta que me tengas por tal, lo mismo que yo también te tengo como a una amiga y muy querida.

Un beso enorme, mi niña!!!

LA ZARZAMORA dijo...

A veces esas vidas sencillas resultan ser las más complicadas y basta con prestarles algo de atención.

Besos, Africa.

J.M. Ojeda dijo...

¡Hola Africa!
Yo digo quizás en demasiadas ocasiones. A veces, solo a veces, la vida sorprende sobresaltando los sentimientos.

Saludos de J.M. Ojeda.